
Después de pasarme todo un verano dependiendo del tranvía para moverme, lo más obvio es hacer una recopilación de consejos aplicados a numerosos medios de transporte. Porque por muy útiles que nos puedan ser, son tan dignos de confianza como un humano...
- El único inconveniente que tiene el transporte público es... pues eso, que es público.
- El de detrás siempre pone los pies contra su respaldo.
- Baje la guardia y se sentará sobre el chicle.
- El único día que se olvide del billete podrá probar la existencia de un ser de leyenda urbana: El revisor.
- Dicho popular: Antes drogarse que marearse.
- Despidase de su maleta con igual o mayor afecto que de sus familiares: Hay más
posibilidades de volver a ver a éstos últimos que a la primera. - Que en el aeropuerto no se cobren impuestos sólo es sinónimo de que el precio bruto será mucho más caro.
Consejo: Ataque a las máquinas exprendedoras. - Si se queda dormido, se pasará de su parada.
- Las puertas de embarque se cambiarán justo en el último momento a la zona más alejada posible de donde usted se encuentre.
- Que el ser humano naciera con dos piernas, no significa que tenga que utilizarlas.